Automatización industrial para resolver problemas de manera inteligente

La automatización de los procesos industriales y un mayor control de la producción son unas de las estrategias más eficaces para aumentar la eficiencia en las empresas.

¿Cuáles son los problemas de producción más comunes que puede solucionar una buena automatización?

Actualmente ya hay sistemas de automatización al alcance de cualquier empresa, independientemente de su tamaño, que ayudan a resolver problemas habituales en fabricación.

Falta de productividad y flexibilidad en el proceso

  • Índice OEE desconocido o inferior al 50%
  • Anarquía en planta
  • Problemas de planificación
  • Lead times desconocidos o excesivos
  • Rigideces en los cambios en el proceso
  • Operaciones de poco valor añadido
  • No adecuación a demanda (takt time)

Mis activos tienen capacidad para producir más pero no la aprovechamos y están infrautilizados.

Gestión compleja del talento

  • Problemas a la hora de incorporar personal cualificado
  • Tiempos de «onboarding» excesivos
  • Conocimiento descentralizado y en islas
  • Cada operario aborda las tareas de forma diferente

La falta de personal está limitando el crecimiento de la empresa.

Problemas de calidad

  • Elevado volumen de defectivo
  • Falta de correlación de la inspección con parámetros de proceso
  • Tiempos de respuesta lentos, generando mucho defectivo antes de poder actuar
  • Trazabilidad limitada
  • Visibilidad de la calidad en tiempo real limitada

Los márgenes son más ajustados y la competencia mayor. No podemos permitirnos nuestro actual coste de NO calidad.

Visibilidad reducida y falta de planificación

  • Visión limitada o inexistente de lo que sucede en el taller
  • Acceso limitado a la información operacional
  • Integración inexistente de los procesos y activos con resto de soluciones ERP, MES, PLM, etc.
  • Falta de KPIs para evaluar la producción

No somos capaces de identificar los cuellos de botella de nuestros procesos, ni de identificar áreas de mejora.

Desconexión de lo que sucede en el taller con el resto de los sistemas

  • Sin conexión entre la maquinaria en tiempo real y los controles de procesos
  • Dificultad para detectar irregularidades en los dispositivos físicos
  • Dificultad en la gestión de las piezas
  • Multitud de soluciones IT independientes
  • Diferentes protocolos de comunicación

La gestión de una planta de producción no es sencilla. La falta de conexión de nuestros sistemas con lo que sucede en el taller nos limita mucho la mejora.

Una medida clave: procesos flexibles y desatendidos

El índice OEE es una medida clave de la eficiencia y productividad de un sistema de producción. Sin embargo, por sí solo no da respuesta a muchas de las preguntas que nos hacemos quienes producimos.

¿Cómo hacerlo?

¿Cómo fabricar más unidades a coste inferior? ¿Podemos reducir el tiempo que transcurre desde que iniciamos el proceso de producción hasta que se completa? ¿Podemos hacerlo manteniendo la calidad y aprovechando mejor los recursos?

La respuesta

La respuesta está en la automatización de los procesos. La tecnología nos está permitiendo, no solo optimizar capacidad de producción de las máquinas, sino también dotarlas de autonomía en la toma de decisiones.

Una buena automatización consigue mejorar el OEE trabajando en la disponibilidad de los equipos, en su eficiencia y en la calidad de las piezas. Y además, ejecutando trabajos de forma desatendida.

La automatización inteligente refuerza la flexibilidad de los procesos y su eficiencia, con un impacto directo en la OEE.

Automatización desatendida y mejora automática

¿Hay algo mejor que un sistema de control de procesos que recoja los datos y permita analizarlos para mejorar la producción?

Sí, que lo haga automáticamente.

La automatización inteligente actúa sobre los parámetros de máquina y ejecuta trabajos de forma desatendida mejorando la productividad.

Automatizar de forma inteligente es incorporar las mejoras de forma autónoma.

La gestión de los datos debe ser comprensible y en tiempo real para que sea útil

Parece básico: el acceso a los datos debe ser intuitivo, ergonómico (¡estamos en un taller!) y directo. Y sin embargo, hay soluciones para la visualización de procesos en las que te pierdes, con datos no fiables o ininteligibles. El dato por el dato no es útil.

Para facilitar el trabajo en planta y que los resultados se materialicen con éxito, el sistema de automatización debe ofrecer una interfaz clara y sencilla, que refleje la capacidad productiva real de los equipos controlados y facilite el cambio.

Automatizar de forma inteligente también es que cualquiera pueda sacarle partido a los datos y hacer modificaciones sin depender de terceros.

Automatizar procesos no robustos es malgastar la inversión

A la hora de abordar un proyecto de digitalización y automatización es importante hacerlo desde una perspectiva de optimización del proceso.

 

Optimizar las operaciones requiere de evaluar cada proceso que interviene en la producción, incluyendo los principales enemigos de la productividad: paradas no programadas, reprocesados de piezas defectuosas y actividades no terminadas.

¿Por dónde empezar?

Empezar a automatizar no implica que debas tener TODOS tus procesos robustos. De hecho es recomendable empezar a trabajar con determinados subprocesos que están controlados y que sean críticos. De esta forma conseguiremos un impacto rápido que luego podamos escalar.

Automatizar de forma inteligente es optimizar los procesos.

La inversión en tecnología es cada vez más rentable

Invertir en automatización es una excelente manera de ahorrar tiempo y esfuerzo, y mantener la competitividad de la empresa.

Puedes encontrar sistemas de control integral de procesos como nuestra plataforma MIC que pueden resultar más rentables que la sustitución del equipamiento.

Automatizar de forma inteligente es rentable.

Poder elegir qué automatizar y cuánto

Cada fábrica se acerca a la automatización industrial de manera distinta. Algunas empresas se sienten más cómodas empezando por algo pequeño, y otras ya cuentan con algunos procesos automatizados que hay que sincronizar.

En el mercado encontramos sistemas de automatización que denominamos flexibles. Pero quédate con esta idea: además de flexible, la automatización debe ser escalable, es decir, que permita controlar máquinas o robots, procesos parcialmente manuales o líneas de producción enteras.

Automatizar de forma inteligente es poder elegir hasta donde llegar, y una vez allí, poder seguir.

No necesitas ser experto/a en todas las nuevas tecnologías

La colaboración es clave en la automatización. Las empresas pueden beneficiarse de colaborar con partners especializados capaces de ofrecer nuevas tecnologías a las que por sí mismas nunca podrían tener acceso.

Automatizar de forma inteligente es apoyarse en partners de confianza y especializados.